domingo, 27 de agosto de 2017

Artículos de opinión


¡Dejé de ser católica y me sentí como recién nacida!

 

 

 

Tras muchas conversaciones, poco productivas, con luteranos y católicos sobre el sentido de la vida, incluso con teólogos, necesité investigar si cabe aún más seriamente sobre Dios, pues cada vez estaba más convencida de que lo que yo sabía sobre la justicia y el sentido de la vida – dice Gabriele la profeta y mensajera de Dios para nuestro tiempo – era incompleto y deficiente. Al final, tras muchas conversaciones tuve que constatar que muchos me miraban con incomprensión cuando preguntaba: ¿pero cuál es el sentido de la vida?

 

Un día un conocido me dijo: «Busca la respuesta en ti, pues Dios está en ti», entonces se me agudizaron los oídos. Yo sin embargo le contesté: "solo soy de carne y hueso" a lo que él me respondió: "Nosotros ni podemos mirar hacia los Cielos ni comprender el lenguaje de la verdad si nos orientamos hacia fuera, es decir si nos atamos a tradiciones eclesiásticas institucionales. Paulatinamente tenemos que hacernos conscientes de que cada persona es un templo de Dios y que en cada persona vive la verdad, algunos denominamos Dios y otros Jehová, Cristo, el SER, Alá o Espíritu Santo". Me aconsejó –continuó diciendo Gabriele– que rezara seriamente y que dirigiera mis preguntas hacia el interior. Pero también me dijo: "Tu vida sólo cambiará cuando tú cambies. La mejor ayuda que puedo darte es que  orientes tu vida a los Diez Mandamientos de Dios y al Sermón de la Montaña de Jesús".

 

Yo le pregunté por qué soy católica. La respuesta fue: porque ya cuando eras un bebé tus padres te bautizaron en esa institución. Siendo un bebé no podías decidir libremente, pero ahora tienes la libertad de decidir. Decide entonces como lo sientas. Al poco tiempo me retiré de la institución Iglesia y me sentí como recién nacida, es decir, libre. Sabía que mis muchas preguntas no me las podía responder ni un teólogo ni un creyente de Iglesia. Recordé un viejo refrán que dice: Ayúdate a ti mismo, que Dios te ayudará. El «ayúdate a ti mismo» lo comprendí de la manera siguiente: primero reza y cumple paso a paso los Mandamientos de Dios y el Sermón de la Montaña de Jesús, tal como me había recomendado mi conocido. Lo que habría de venir después lo puse confiadamente en las manos de Dios, sabiendo que Él se encargaría de ello, y así fue.

 

Empecé a rezar y pasados aproximadamente cinco años irrumpió la misión espiritual que, como he dicho, estaba en mi alma: ser portavoz del Eterno. Con la orientación a Dios en mí aprendí también a comprender a mis semejantes. Me fui volviendo internamente más libre y más feliz.

 

La voz eterna en mí me enseñó lo que significa la justicia divina, y del conocimiento de la justicia de Dios y de su aplicación se desarrollaron en mí las legitimidades de la tolerancia y de la libertad frente a mis semejantes. En la justicia de Dios toda persona tiene la absoluta libertad de decidirse por Dios o contra Dios. En mí la decisión por la verdadera libertad se convirtió en la certeza de que únicamente Dios significa: vida feliz, pacífica y sana. A través de mi decisión por Dios percibí muy pronto la presencia de Dios en mí. Desaparecieron los temores y las agobiantes preocupaciones, puesto que creció la confianza en Dios. Ahora soy feliz de corazón y me siento acogida en Dios. El sentir en mí la poderosa fuerza del amor y el saber que está en mí me hace independiente y libre. Esto significa para mí: estar en casa en y con Dios.

 

 

José Vicente Cobo (45277997j)

Del Programa: El ateo y el profeta - Capítulo 2

www.editorialgabriele.com

El exceso de sol es un lastre para la glándula tiroides

 

 

 

En los últimos años y tal vez en las últimas décadas, la irradiación y la intensidad del sol se han vuelto mucho más intensas. Esto se ve también en que han aumentado significativamente los casos de cáncer de piel. La razón es que la capa de ozono, que es la capa protectora de la Tierra va reduciéndose. Las consecuencias de esta "irresponsabilidad" para con nosotros mismos han sido advertidas desde hace años por los dermatólogos. De hecho, las enfermedades cutáneas han aumentado notablemente en los últimos años.

 

Pero desde hace años llegan también informaciones y advertencias desde otras fuentes. Por ejemplo a través de la profecía para el tiempo actual sabemos que "El calor del mediodía no es bueno para los nervios humanos, pues el exceso de partículas solares puede producir, bajo determinadas circunstancias, una gran inquietud y la crispación del sistema nervioso. Provocando un efecto de lastre que carga a la glándula tiroides en el cuerpo del hombre, lo que por su parte produce diferentes alteraciones en el organismo humano».

 

En base a este mensaje queda claro que no sólo la piel queda sometida a una exposición solar exagerada que nos broncea, si no que existen daños colaterales apenas perceptibles a simple vista. Una de las consecuencias más conocidas es el cáncer de piel, pero no la única. El sistema nervioso del ser humano se ve afectado, con lo que la persona puede volverse más nerviosa, excitable, depresiva e incluso psicótica. Las conocidas insolaciones que producen a simple vista dolor de cabeza, fiebre y excitabilidad, pueden tener consecuencias que la ciencia va conociendo paulatinamente, pero que hace más de 25 años fueron ya advertidas a través de las manifestaciones dadas por el mundo espiritual.

 

Si bien es cierto que la luz nos anima de alguna forma, y que incluso es recomendable en dosis bajas para la fijación de la vitamina D, en situaciones extremas de exposición exagerada y cuando el sol irradia con intensidad, hay que tomar precauciones.

 

 

Mª José Navarro (24764815W)

Del programa: Siembra y cosecha

www.radio-santec.com

 

 



domingo, 20 de agosto de 2017

Artículos de opinión



 

Muchas personas mayores, pero pocas personas sabias

 

Ser joven no es sólo una etapa en el ciclo de la vida, sino que es una postura interna que no está sujeta ni a un tiempo ni a una edad determinados. Que la persona sea joven o mayor en años no es lo decisivo, depende de qué es lo que hace la persona con su vida. Eso es lo que cuenta y lo que revela cuan joven es ella anímicamente. El desarrollo de la vida terrenal depende de los pensamientos de la persona. Pues tal como la persona piensa, así será a más tardar en la vejez.

En lo profundo del alma de cada persona fluyen las fuentes creativas, pero quien atasque las fuentes espirituales creativas con inculpaciones diarias a otras personas, o con continuas lamentaciones sobre lo que el día le trae a ella, no encontrará su vida, da igual que la persona sea joven o de más edad. También quien lleve una vida negligente, o quien concluida su formación profesional piense: "Ahora ya he aprendido lo suficiente, los conocimientos y habilidades que he adquirido me bastan", envejecerá y se convertirá en una persona senil, porque ella misma se "encierra" es decir, estrecha su consciencia. Si la persona joven se enreda en actitudes y comportamientos de este estilo, puede estar seguro de que no sólo envejecerá de año en año, sino que es posible que en su juventud, aunque aún tenga la piel joven y elástica, sea ya una persona "vieja". El mero hecho de tener arrugas dice poco, el marchitarse, es decir el entrar en edad es algo inevitable, está fundamentado en las leyes naturales. Sólo la actitud que se tiene al ir entrando en años define cuanta plenitud de vida posee una persona de edad.

Se dice que nuestra sociedad actual es una sociedad envejecida, con lo que se hace referencia a que cada vez hay más personas viejas, y en proporción cada vez menos personas jóvenes. Yo quisiera añadir, dice Gabriele la autora de estas líneas, que la cantidad de personas que a menudo ya en la mitad de la vida se caracterizan por una sensación de resignación y de pesimismo frente a la vida, es elevada. La falta de perspectiva interna para la vida les ha privado en gran medida de dinamismo, ímpetu y perseverancia. Estas personas se van arrastrando a duras penas por sus días terrenales, más o menos descontentas, malhumoradas y sin ninguna alegría, sin embargo pocas veces se plantea la pregunta de por qué esto es así.

La época actual con su tendencia hacia lo externo nos da la respuesta: los numerosos atractivos, sobre todo los que llegan a través de Internet y de la televisión, son los que mueven a los jóvenes, quienes entonces van teniendo pretensiones que pocas veces se cumplen. En nuestra sociedad actual hay lamentablemente muchas personas "viejas" y en cambio pocas personas de edad que encarnen la sabiduría de la vida, y que contribuyan a que en la sociedad se pueda mantener cierta estabilidad de valores, los que podrían ser un aliciente para los jóvenes. En la sociedad actual todos aspiran a crear un lugar adecuado para su ego y poder recibir un trozo considerable del cada vez más escaso "pastel" de la sociedad.

 

 

Mª José Navarro (24764815W)

Del libro: "Mucha, mucha vida"

www.editorialgabriele.com

¿Quién descansa realmente en la catedral de Santiago?

 

 

 

 

¿Qué hay de verdad en torno al sepulcro y a los supuestos restos del apóstol en la ciudad de Santiago de Compostela? Según el crítico literario Sánchez Dragó, toda la historia de Santiago podría ser bastante diferente a como se cree y en realidad en dicho sepulcro no descansarían los restos de Jacobo, el apóstol Santiago, sino de Prisciliano de Ávila que fue el primer ajusticiado como hereje a finales del siglo IV por la Iglesia Católica ¿qué significaría entonces esto para los incontables católicos que llevan miles de años peregrinando a la tumba de un hereje?

 

Prisciliano, al que Dragó llama el mas grande de la historia de España, era igualmente vegetariano y enseñaba que a Dios se le puede experimentar en la naturaleza y que el alma vuelve a encarnarse en otro cuerpo, es decir que creía también en la reencarnación. Con ello se encontraba justamente en la misma corriente que el cristianismo originario, la que posteriormente fue reprimida por las Iglesias del poder y transformada en todo lo contrario.

 

Ciertamente en la Edad Media los peregrinos buscaban el lugar de reposo del Apóstol Santiago, como la añoranza por algo verdadero, la intuición de que existe un cristianismo puro, lo más distante posible de Roma y también del Bizantinismo, que ya era conocido en aquel entonces, es decir lo más lejos posible del dominio de la casta sacerdotal y de su teatro de dogmas, ritos y liturgias.

 

Pero existen muchos caminos hermosísimos en la naturaleza y muchos más tranquilos que el camino de Santiago, para dejar paso en nosotros al lenguaje del alma expresado en añoranzas. Cada uno puede seguir tantos caminos externos como quiera, pero al fin y al cabo la verdad se encuentra dentro de nosotros mismos. Esa fue la verdadera enseñanza del Nazareno: "El Reino de Dios está dentro de vosotros" y "Cada uno es el Templo del Espíritu Santo". Lo que significa que el verdadero peregrino a Dios no va a Santiago, ni adora ninguna figura de poder eclesiástico externa,  ni va a cualquier otro lugar de culto, ni rinde honores a imágenes, sino que va por el camino al interior que le conduce a Dios.

 

 

 

Teresa Antequera Cerverón (73891412-W)

    Del program: ¿El camino de Santiago?   

www.radio-santec.com

 

 

lunes, 14 de agosto de 2017

Artículos de opinión



Con el tiempo tus preocupaciones marcarán tu cuerpo

 

Hay personas a las que ya en la juventud se le intuye la caracterización física de su futura vejez, sin embargo hay personas de edad que tienen una caracterización juvenil. Esto sucede porque quien se provee del manantial del Espíritu eternamente joven tendrá una piel ciertamente marchita en la vejez, sin embargo su ser seguirá siendo juvenil, y las funciones de su cuerpo estarán intactas porque la persona es mentalmente activa y sigue manteniendo la capacidad de aprender. Si el Espíritu eternamente joven, la luz de Dios, puede traspasar con su irradiación a la persona, entonces despierta el alma eternamente joven que traspasará con su luz al cuerpo que se va marchitando y que concede a la persona un frescor juvenil hasta en la edad avanzada.

Muchas personas se preocupan cada día por su cuerpo físico, se ocupan hora tras hora con sus dolencias, pero sólo un pequeño porcentaje advierte que con su comportamiento, con sus pensamientos y conversaciones llenos de preocupaciones, se aplican en definitiva ellas mismas estas dolencias o incluso enfermedades. Pues todo se basa en energía. También los pensamientos y las palabras son energías. Las energías llenas de temor y llenas de preocupaciones son absorbidas por las células corporales y marcan a la persona con el paso del tiempo.

El efecto o el resultado de nuestros pensamientos y palabras lo podemos comparar con afinar un instrumento musical, pues con nuestros pensamientos y palabras afinamos al mismo tiempo las células de nuestro cuerpo. De acuerdo con esto, el origen de la salud o de la enfermedad está en nuestro comportamiento frente a nuestro cuerpo. De la misma forma también nosotros mismos determinamos el ser juvenil o el ser viejo en la vejez.

Hagámonos conscientes de lo siguiente: El miedo a cualquier enfermedad es el camino a la enfermedad. Por eso deberíamos acostúmbranos a llenar nuestro corazón con la confianza en Dios, el Eterno, y a liberarnos del miedo, de la envidia, y de pensamientos de odio.

 

 

Teresa Antequera Cerverón (73891412-W)

Del libro: "Mucha, mucha vida"

www.editorialgabriele.com

 

El egoísmo es el signo distintivo de nuestro tiempo

 

 

Es posible que actualmente muchas personas opinen que los sentimientos no son modernos y que deberían ser eliminados para poder disfrutar de la vida sin ser molestados. Pero precisamente los sentimientos, que no hay que confundir con sentimentalismo, son unos dones valiosos, son la balanza de nuestra conciencia en la que sopesar lo que es correcto y lo que no lo es.

 

¿Por qué ha alcanzado nuestra sociedad un nivel ético y moral tan bajo? Porque cada uno piensa sólo en sí mismo, en los que tienen su misma fe, o son de su mismo partido político. Muchos piensan únicamente en su capital, en su provecho y en sus bienes. Todo para su bien personal.

 

En la mayoría de los casos al resto de personas no importan, tampoco importa cómo se siente el prójimo o cómo le va, si se arregla a vivir con unos ingresos ínfimos, o cómo se encuentra la persona que está sola con sus hijos porque su cónyuge ha iniciado otra relación, cómo les va a los jóvenes bajo la influencia de las drogas, cómo se encuentra la familia que tuvo que abandonar su casa porque ya no podían pagar más intereses, o cómo se encuentran los desempleados y los necesitados de ayuda social.

 

A la mayoría les da igual, lo importante es que uno esté en el lado "correcto" es decir al lado del hechor y no al lado de la víctima. Aunque los políticos digan palabras caritativas, los necesitados de ayuda social sufren cada vez más bajo los "amigos de las beneficencias". Pero Jesús de Nazaret habló del amor al prójimo, de compartir y de no acumular riquezas, pero ¿qué hacen los llamados cristianos con Sus excelsas enseñanzas?

 

 

Teresa Antequera Cerverón (73891412-W)

De la publicación gratuita. "El joven y el profeta"

www.editorialgabriele.com

 

domingo, 6 de agosto de 2017

Artículos de opinión



Las personas de edad también puede ser juveniles

 

 

 

Si los jóvenes de hoy día piensan que disponen de muchos años para reflexionar sobre la vida y sobre la vejez se equivocan, sería aconsejable que supieran que para cada persona llegará la hora en la que el alma partirá de esta Tierra. Nadie sabe cuándo llegará ese momento, si será durante los años de juventud, en la edad media o en la vejez, pero quien considere esto ya en los años de juventud y se pregunte qué significa crecer y madurar espiritualmente, la vida le irá mejor.

 

La mejor ayuda que se le puede regalar a un joven es sin duda la regla de oro de Jesús de Nazaret, quien dijo: "Lo que no quieres que te hagan a ti no lo hagas tampoco tu a nadie". De esta forma la vida de quien tome en cuenta esta genial regla para la vida, la integre en su forma de pensar y de comportarse haciendo que se convierta en modelo para su vida, será una vida rica en experiencias. Los sentidos, el talante y el estilo de vida de quien se atenga a esta enseñanza, se irán volviendo más finos, y en su mundo de pensamientos se pondrán entonces de manifiesto la sabiduría de vida que hace que la vida sea más rica.

 

Las personas que apliquen esta regla para la vida nunca se sentirán carentes de hogar, y en la vejez tampoco se volverán tristes ni amargadas mientras esperan desolados la hora de su muerte. Quien llena su vida con las reglas para la vida de Jesús de Nazaret, por ejemplo El Sermón de la Montaña,  podrá decir que la vida es imperecedera.

 

Es ley natural que la juventud se acabe, sin embargo el ser juvenil es también propio de aquellas personas de edad que en su juventud comprendieron que envejecer en ningún caso significa ser viejo, y que marchitarse en ningún caso significa debilidad mental. Y a pesar de que con los años el vigor del cuerpo va cediendo, el espíritu en el cuerpo humano no se verá afectado por ello.

 

Los jóvenes añoran libertad y felicidad, por eso un consejo para ellos: "Nunca dejes de aprender". Pues el tesoro que nos regala el aprender a la larga no se puede encontrar en este mundo. Toda búsqueda en el mundo es un riesgo y en algún momento conducirá al desengaño. La felicidad que uno busca se podría comparar con un espejismo: "uno se dirige alegre hacia un maravillo oasis, se imagina como descansará y se reconfortará bajo las palmeras, incluso es posible que piense que ha encontrado su hogar, pero apenas crea poder tocar el lugar de la felicidad, el supuesto oasis empezará a desvanecerse pues solo era una imagen engañosa, una apariencia". De ahí la reflexión de que la felicidad y la libertad se deben encontrar y hacer crecer en el interior. Para ello la aplicación de la regla de oro de Jesús de Nazaret es el camino hacia el tesoro, que es la verdadera vida, y esto vale tanto para los jóvenes como para las personas de edad. Pues quien haya comprendido el sentido de la vida nunca claudicará ni en la juventud ni en la vejez.

 

 

 

Mª José Navarro (24764815W)

De la publicación: "Mucha, mucha vida"

www.editorialgabriele.com

 

 

 

 

¿Por qué es el amor tan exagerado?

 

 

 

A lo largo de la historia las personas que han aspirado a la espiritualidad, se dieron cuenta de que el amor verdadero que crece en el interior no es algo exagerado, es un sentir que produce alegría interna profunda, franqueza y compenetración con el prójimo. El amor verdadero y por ello divino, no se vanagloria, es reservado y espera, sin embargo se regala en todo momento donde es necesario y conveniente. Por ello a los verdaderos sabios espirituales, se les considera a menudo como personas frías, faltas de amor y duras, porque no cultivan el amor exagerado, el amor humano, sino el amor desinteresado que fluye desde el interior y que se une con lo interno en el prójimo.

 

No debemos imponer ninguna presión a nuestro prójimo, tampoco mediante un amor humano exagerado. Muchos creen poder convencer a su prójimo con amor y cautivarlos con ello, pero esto significa abusar del amor. Cada persona tiene su libre albedrío y debe conservarlo, pues el amor interno es una entrega tranquila, que se regala, una comprensión profunda del prójimo. El amor exagerado es humano y no da testimonio de reconocimiento profundo ni de sabiduría divina. Sin embargo la vida terrenal es una escuela del amor y de la sabiduría divina y quien ha terminado con buen éxito esta escuela, ha cumplido la finalidad de su vida terrenal.

 

El amor verdadero no tiene gestos externos, es un dejar fluir la corriente interior. Desde el interior deberían fluir hacia el prójimo las fuerzas del amor desinteresado y de la benevolencia. Gestos externos, apretones de manos y abrazos con muchas palabras de amor y apasionamiento es amor humano, es exagerado.

 

 

 

Mª José Navarro (24764815W)

De la publicación: "Con Dios es más fácil vivir"

www.editorialgabriele.com